ENTIENDE LA CELULA

 

Las iglesias de Asia os saludan. Aquila y Priscila, con la iglesia que está en su casa, os saludan muy afectuosamente en el Señor. (1 Corintios 16:19, LBLA).

Biológicamente, la célula es la unidad estructural más pequeña de un organismo, capaz de funcionar independientemente. Una gota de sangre, por ejemplo, ¡tiene aproximadamente 300 millones de células rojas! La infotrmación genética completa de una célula se duplica en cada célula hija.

Las células de la sangre nutren y protegen al organismo llevando los nutrientes a cada parte del cuerpo y retirando todos los productos de desecho. Las células funcionan interdependientes con el cuerpo y no aparte de él. Cada célula crece y reproduce sus partes  hasta dividirse en dos células. Estas se dividen constantemente para reponer las células muertas y volver a continuar el proceso.

Así como las células individuales se unen para formar el cuerpo de un ser humano, las células en una iglesia forman el cuerpo de Cristo. Las células conectan a las personas, permiten que los creyentes muestren el amor "los unos por los otros" como dice la Biblia, y que se formen discípulos. Las células también se multiplican y dan vida a toda la iglesia.

¿Qué es un grupo celular? Definir el grupo celular no es apenas un ejercicio académico. Asegura un control de calidad que permite que la vida de Cristo fluya a cada parte del cuerpo. La calidad debe formar parte de cualquier definición válida. El termino grupo celular como será utilizado en esta publicación, y de acuerdo con las iglesias celulares crecientes alrededor del mundo, se puede definir de la siguiente manera:

"Un grupo de 3 a 15 personas que se reúnen semanalmente fuera del edificio de la iglesia, con el propósito de evangelizar, tener compañerismo y crecer espiritualmente con la meta de hacer discípulos quienes a su vez hacen discípulos que resulta en la multiplicación".

Observe como esta definición de máxima flexibilidad pero que mantiene la calidad y permite que el grupo progrese. Dentro de esta definición es posible incluir una amplia variedad de grupos celulares (Células de hombres, mixtas, de mujeres, familiares, de jóvenes, infantiles, etc.), amplia variedad de material para la lección, diferentes ubicaciones (casas, restaurantes, universidades, etc.) y aun el alto grado de participación (algunos grupos celulares son dirigídos más por el líder que por la participación de todos los miembros).

Alguien dijo una vez que si dos personas se reúnen de vez en cuando para clavar clavos en el techo, él lo consideraría uno de los pequeños grupos de la iglesia. Aunque en cierto sentido eso es verdad, una definición tan amplía disminuye drasticamente el control de calidad. Por ejemplo, un club de montar a caballo, una reunión de diáconos o un ministerio de visitas a la penitenciería no son grupos celulares que buscan multiplicarse.

Es cierto, cada uno de estos grupos es pequeño pero no contienen todos los vitales elementos de calidad incluidos en nuestra definición de grupo celular. En una reunión de diáconos por ejemplo, sería muy difícil la evangelización, (¡a menos que la iglesia fuese muy liberal!). La evangelización es parte fundamental dentro de la célula y por eso se hace necesario que las personas se relacionen entre sí con ese objetivo, por eso, vemos que la iglesia primitiva comenzó en las casas.

Entonces, es necesario como líder de una célula que tengas una visión clara de lo que en realidad debe ser una célula. Por otra parte, debemos tener claro también cual es el objetivo de ella, e invertir todo nuestro esfuerzo en hacer discípulos para que luego estos hagan más discipulos. La célula debe ser:

1. El tamaño de la célula. Las células deben permanecer todo el tiempo lo más pequeñas posible para que cada persona pueda participar y pueda desarrollar relaciones francas e íntimas.
2. Regulares. Las reuniones celulares semanales son la norma para asegurar el control de calidad.
3. Penetración. Las células deben realizarse fuera del edificio grande de la iglesia para que se logre el objetivo de penetración en el mundo donde las personas viven, trabajan y juegan.
4. Evangelización. Todo líder de célula debe darle prioridad a la evangelización y también, debe animar a sus miembros a involucrarse en ello.
5. Relacional. Las personas anhelan tener relaciones estrechas y francas; y los grupos celulares ofrecen esa posibilidad. El líder le debe recordar a sus miembros que hemos sido creados para vivir en comunidad.
6. Crecimiento espiritual. Los grupos celulares ofrecen el cuidado pastoral y el crecimiento espiritual para los que asisten.
7. Multiplicación. La meta y el resultado del buen discípulado debe ser el desarrollo de un nuevo líder para continuar con el proceso de multiplicación.

La meta de la célula es hacer discípulos y que estos a su vez produzcan más discípulos. Definir bien el concepto de pequeño grupo  asegurará de que esta meta sea posible.

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De: DIRIGE (Guía a un grupo pequeño a experimentar a Cristo) | Joel Comiskey.

SIGUIENDO EL MODELO DE CRISTO

La iglesia celular se acerca al método del discipulado bíblico de Jesús. No hay una comparación exacta, pero los puntos en común abundan. Esa mism pasión que gobernaba la vida de Cristo en el entrenamiento de los doce debe impulsar al líder de la célula para ubicar, desarrollar, y entregar nuevos líderes celulares.

El líder de una célula ha hecho el compromiso de mantenerse aparte de la muchedumbre, haciendo un compromiso de mayor nivel con Jesucristo. 

Estos son los verdaderos discípulos en cualquier iglesia y deben ser reconocidos como tales. Las grandes iglesias van un paso más allá y tienen como meta enviar a trabajar un ejército entero de líderes celulares.

LA IGLESIA ELIM, EN EL SALVADOR. Pastor Mario Vega

La iglesia Elim de El Salvador sigue el modelo de Cristo para hacer líderes discipulos, para ello, depende en gran medida de una reunión grupal cada semana para brindar capacitación continua a los líderes. Esta reunión se lleva a cabo a nivel de cada zona en lugar de a nivel de iglesia general debido al enorme tamaño del ministerio celular.

Los pastores de zona se reúnen semanalmente con los supervisores y líderes celulares para enseñar la lección semanal para que estos a su vez, puedan enseñarla a sus grupos. Elim prepara los estudios celulares en forma escrita para el líder celular y luego entrena diligentemente al líder para la entrega de las lecciones.

Durante estas reuniones, los pastores y supervisores de zona brindan aliento, motivación y visión. Se requiere que todos los líderes de células asistan a esta reunión semanal siguiendo el modelo de Cristo. 

Un líder de célula (de adultos, jóvenes o niños) debe recibir el equipamiento típico de seis meses incluido  en el libro de la Ruta del Líder. El libro (folleto) contiene 26 lecciones que cubren la doctrina fundamental, como orar, el bautismo, la tentación y como dirigir un grupo celular.

A menos que haya problemas de carácter, la persona que completa el equipamiento de seis meses puede liderar un grupo célular de niños, jovenes o adultos o al menos formar parte de un equipo de liderazgo.

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De: EXPLOSION DE LIDERAZGO | Joel Comiskey.

CELULA EXITOSA

¿QUE HACE QUE LAS CELULAS SEAN EXITOSAS?

¿Que hace que las células sean exitosas? Las células exitosas requieren una atmosfera saludable. Pero, lamentablemente, muchas de ellas hoy en día no florecen. Cojean año tras año y finalmente mueren, deteniendose antes de vivir la vida que Dios tiene para ellas. Al igual que en una selva, las células exitosas no ocurren por casualidad ni simplemente porque la gente quiera que sus células prosperen. Las comunidades exitosas requieren una mezcla sobrenatural de oración y unción dirigida por el Espíritu Santo que hace que todos puedan participar y que le abre la puerta a la presencia sanadora de Dios y a la vida vibrante que bendice a los demás. En este blog usted podrá explorar cómo tu célula también puede ser exitosa.

Recuerda que la célula es como una reunión de buenos amigos con la presencia de Jesús en medio de ellos. En realidad, en una célula exitosa, las personas se sienten amadas, aceptadas y abrazadas. Nadie se esconde detrás de temas religiosos o siente necesidad de fingir para estar a la altura. Los miembros de la célula se ríen, lloran juntos y se escuchan profundamente el uno al otro.

El líder no impone nada y no controla la reunión para intentar que esta prospere. En cambio, él crea un lugar seguro para que todos puedan compartir. En lugar de largos monólogos sobre hechos del estudio bíblico, el líder eficaz es una facilitador que hace preguntas para que todos puedan participar. Preguntas como: ¿Qué dice el pasaje? ¿Qué está diciendo Dios a mi vida a través de este pasaje? ¿Cómo puedo aplicar este pasaje en mi vida la semana siguiente?

Esto produce en la célula enormes beneficios; hay más participación de los asistentes a la célula, hay tiempo, y más libertad para que las personas usen sus dones espirituales para que las personas puedan ser animadas y edificadas como lo dijo Pablo en 1 Corintios 14. La célula es como una reunión de buenos amigos con la presencia de Jesús en medio de ellos. A veces hay conversaciones dificiles, pero los miembros de la célula se comprometen a resolver cualquier problema.

Nuestra oración es que cada una de nuestras células experimenten esta visión. Donde está no llegue, debes saber que Dios si puede llegar, y puede dar vida. Nuestras células no necesitan continuar como lo están hasta ahora y tu como líder puedes aprender un mejor camino que le dará aire fresco y vida a tu célula. Este es el objetivo que tenemos con nuestra ruta de lider. "Trazar nuevos caminos que traigan nueva vida y nuevas esperanzas".

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La palabra "Facilitador" describe la función del líder de empoderarar a cada  miembro para que este se desarrolle y crezca. Los sinonimos de empoderamiento incluyen habilitación, permiso y aprobación. Los facilitadores alientan a las personas a salir, intentar cosas nuevas e incluso abrazar la idea de cometer errores mientras comparten, usan sus dones y contribuyen a la vida célular.

Cuando los líderes abandonan las células, los miembros tienen la confianza para continuar la célula con la ayuda del Espíritu Santo. Sobre todo, los miembros han aprendido a aprender de Dios. Entonces, un líder Facilitador: No se arriesgan a hacer todo el trabajo, no son autosuficientes y no ven la célula como una repetición de la mañana del domingo. Las células que involucran a todos no tienen problemas para mantener a sus miembros.

La verdad es que hay mucho trabajo dentro de la célula para que el líder lo haga todo él solo. Pero, quienes empoderan a sus miembros los preparan para que participen actrivamente, sean parte de un equipo de liderazgo y, con el tiempo, formen parte de una célula. Ellos entienden que la célula es un excelente lugar para preparar discípulos que hacen otros discíipulos. Entonces, el trabajo del buen facilitador es despertar la participación entre los miembros del grupo.

Recuerda que los grandes líderes funcionan como facilitadores que sirven a la célula y empoderan a los miembros para que gocen de Dios y de los demás. En lugar de ejercer influencia sobre la célula, el líder, con humildad, se dirige a ellos en cada oportunidad. La alegría del líder es empoderar en lugar de impartir conocimiento.

Los líderes efectivos alientan a los demás miembros de la célula a hablar sobre lo que piensan. Ellos empoderan a los miembros de la célula a través de la escucha activa. Se dan cuenta que un objetivo importante del grupo celular es formar a cada miembro a través de la escucha activa que resulte en edificación. El líder podría preguntar: "¿Qué piensan los demás?". Se les pide a todos los miembros que respondan y agreguen nuevas ideas, Después de que todos hayan tomado su turno, el líder puede resumir los comentarios de la célula.

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De: Células Exitosas | Joel Comiskey & Jim Egli.